Los líderes judíos se aliaron con el Gobierno romano y lo crucificaron. En los últimos días, Dios Todopoderoso, el Señor Jesús que ha regresado en la carne, ha venido a China a realizar la obra de juicio. De nuevo afronta la condena, la represión y la detención frenéticas, esta vez por parte del Gobierno comunista chino y el mundo religioso. Los rumores y engaños que se han extendido para juzgar y difamar a la Iglesia de Dios Todopoderoso son una especie de trampa invisible que envuelve y controla a un sinnúmero de creyentes. Se repite la tragedia histórica…
Cho Yeonghan es pastor de una iglesia en Corea del Sur. Sirvió al Señor con entusiasmo durante décadas y se ganó el profundo respeto de sus compañeros creyentes. En los últimos años, su iglesia se fue quedando cada día más desolada. Las malas obras iban en aumento e incluso él mismo se encontraba a menudo sumido en el pecado. En consecuencia, estaba tremendamente triste y se sentía muy confundido... Tras pensarlo mucho, renunció en firme al puesto de pastor y abandonó su denominación en busca de una iglesia que tuviera la obra del Espíritu Santo, con la esperanza de poder encontrar el camino que le permitiera deshacerse del pecado.
"Ignorancia mortal" Cómo abandonar la ignorancia y recibir al Señor Zheng Mu'en es un compañero de una iglesia cristiana china de los Estados Unidos, ha creído en el Señor muchos años y obra y se dedica apasionadamente a Él. Un día, su tía le da testimonio de que el Señor Jesús ha vuelto para expresar la verdad y hacer la obra de juzgar y purificar al hombre en los últimos días, una noticia que le causa una enorme excitación.
Pero a medianoche se oyó un clamor: '¡Aquí está el novio! Salid a recibirlo'" (Mateo 25:6). "He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él y él conmigo" (Apocalipsis 3 :20 ). Durante los últimos dos mil años, los creyentes en el Señor han estado alerta y esperando que el Señor llamara a la puerta.
Al abrir el periódico o encender la TV, sobre todo vemos guerras, terremotos, tsunamis, huracanes, incendios, inundaciones, accidentes aéreos, desastres mineros, agitación social, conflictos violentos, atentados terroristas, etc. No vemos más que calamidades naturales y desastres provocados por el hombre.
El hombre estaba inmerso en todo tipo de actividades maliciosas sin dedicar el menor pensamiento al arrepentimiento. Nadie escuchaba la palabra de Dios. Su rigidez y maldad despertaron la ira de Dios y, al final, fueron tragados por el desastre del gran diluvio. Sólo la familia de ocho miembros de Noé escucharon la palabra de Dios y fueron capaces de sobrevivir. Ahora los últimos días ya han llegado. La corrupción de la humanidad se acentúa más y más. Todo el mundo reverencia el mal.
Gu Shoucheng es pastor de una iglesia clandestina en China. Lleva muchos años creyendo en el Señor, trabajando constantemente en sus sermones y predicando el evangelio por todas partes. Fue detenido y encarcelado por predicar el evangelio y cumplió una condena de doce años. Tras salir de la cárcel, Gu Shoucheng sigue trabajando en la iglesia. Sin embargo, cuando el evangelio del reino de Dios Todopoderoso llega a la iglesia de Gu Shoucheng, él no lo busca ni investiga en modo alguno, sino que mantiene obstinadamente sus propias nociones y imaginaciones para condenar la obra de Dios en los últimos días y hace todo lo posible por difundir nociones y falacias que desestabilizan a los creyentes y les impiden aceptar el camino verdadero
Crónicas de la persecución religiosa en China Desde que llegó al poder en China continental en 1949, el Partido Comunista de China ha sido incesante en su persecución de la fe religiosa. Ha detenido y asesinado frenéticamente a cristianos, ha expulsado a los misioneros que operan en China y los ha maltratado, ha confiscado y destruido innumerables ejemplares de la Biblia, ha clausurado y demolido edificaciones eclesiásticas y ha intentado en vano erradicar todas las iglesias clandestinas. En años recientes también se ha visto la introducción a gran escala de políticas dirigidas a la "sinificación" del cristianismo por parte del gobierno del PCCh. Miles de cruces de iglesias han sido demolidas, muchas edificaciones eclesiásticas han sido derribadas y un gran número de cristianos en iglesias clandestinas han sido arrestados y perseguidos. Las iglesias cristianas en China sufren una persecución cruel y sangrienta…
el Partido Comunista de China ha sido incesante en su persecución de la fe religiosa. Ha detenido y asesinado frenéticamente a cristianos, ha expulsado a los misioneros que operan en China y los ha maltratado, ha confiscado y destruido innumerables ejemplares de la Biblia, ha clausurado y demolido edificaciones eclesiásticas y ha tratado de erradicar todas las iglesias clandestinas. Este documental muestra la repentina e inesperada muerte de una cristiana china llamada Song Xiaolan, una muerte por la que la Policía del PCCh dio unas explicaciones incoherentes y contradictorias. Después de investigar, la familia Song descubrió que la Policía había estado mintiendo todo el tiempo. A través de un conocido en la Oficina de Seguridad Pública, un pariente de la familia Song supo que la Policía del PCCh había estado vigilando en secreto a Song Xiaolan por creer en Dios y cumplir con su deber. Cuando la Policía la detuvo, la golpeó hasta matarla. Para eludir la culpa, la Policía encubrió la verdad inventándose el escenario de la muerte de Song Xiaolan…
Estos agentes la han torturado brutalmente y también han tratado de lavarle el cerebro con rumores y falacias y utilizado a su familia para intentar coaccionarla, así como otros métodos despreciables para tratar de amenazarla en un intento de obligarla a negar y traicionar a Dios. Sin embargo, guiada por la palabra de Dios, ha superado muchos interrogatorios bajo tortura y refutado con la rotundidad de la verdad los diversos rumores y falacias del PCCh. En el amargo ambiente de la persecución del PCCh, ha dado un hermoso y rotundo testimonio...
"En las profundidades del invierno" Dios está conmigo Se llama Xiao Li. Lleva más de una década creyendo en Dios. En el invierno de 2012, la Policía Comunista China la detuvo en una reunión. Durante el interrogatorio, la policía le intentó sonsacar información y la amenazó, golpeó y torturó reiteradamente para tratar de convencerla de que traicionara a Dios desvelando el paradero de los líderes y el dinero de la iglesia.